martes, 22 de marzo de 2016

Día 31: Tan cerca y tan lejos.

Saber que hemos estado tan cerca y tan lejos estos dos últimos días, es como estar a la vuelta de tu vida: de espectadora, sin aire y oprimiéndome el pecho a diario para respirar cuando te escucho, por eso me cuesta cada vez  más despedirme al colgar, sobre todo si te escucho apurado.

Disculpame, lo hago sin darme cuenta...

(Recuerdo el día que me contaste de esta cebra, hoy la vi)

4:44 a.m ¿Cómo te explico que me muero por verte? ¿Por qué mientras vos dormís, yo te sueño? Mi mente y mi alma te hacen el amor cada noche, sin permiso, sin maldad, recordando cuando puse mis labios sobre tu piel y con la certeza de que cuando visités mi corazón, podás leer todo lo que te he escrito en silencio.


*TE AMO Y NO LO PUEDO EVITAR*


No hay comentarios:

Publicar un comentario